En un mundo donde la tecnología se recarga mientras dormimos, me detengo para jugar con mi hija. Su risa contagiosa me recuerda lo bella que es la vida. Con ella. Con mi hija. Con su bello rostro como única pantalla. Estar presente en cada momento, marca una diferencia.

Amiga, mañana te llamaré para tomar café y jugar a las cartas. ¿Te apetece?

Refrán
“No por mucho madrugar, amanece más temprano”.

Un brindis
Por tu bienestar.