El cometido de este blog es conectar a todas las personas buenas del mundo. Buenas no solo por la intención de sus actos sino por la percepción de los que reciben. No importa cuál es su creencia política o religiosa. El lazo de unión es la bondad. La honestidad. La humildad.

¿Te pasa como a mí? ¿Tienes la suerte de conocer a un número interminable de gente amable y empática?

Tomamos café, analizamos situaciones, compartimos información de lo delicadas que son algunas situaciones de vida en cualquier país del mundo. Referimos noticias de escándalos que rozan el surrealismo, pero que son reales… y regresamos a nuestras vidas contentos por ese momento de café y amistad. Sin embargo, ¿crees que podríamos hacer algo más?… Yo, creo que sí. Que siga creciendo este manto para cubrir la faz de la tierra de bienestar. Cada cual aportará aquello que sabe hacer para el bien común. Sonreír, limpiar, cocinar, gestionar, dirigir, peinar… el mundo es nuestro. Hablemos.

Gente buena, unida, invencible.

Hace unos días ofrecí en donación algunas piezas de muebles y electrodomésticos. Aunque no debemos poner condiciones, sugerí amablemente que cada persona que adquiriese algo, ofreciese otro algo cuando «fuese su momento», iniciando así una interminable cadena de favores.